domingo, 15 de octubre de 2017

El conectivismo: Teoría o Perspectiva





En los tiempos actuales se ha popularizado el debate sobre si el conectivismo se puede considerar una teoría o solo es una perspectiva de como aprendemos en la actualidad, en el contexto de sociedades altamente complejas, producto del aumento progresivo de la información, la globalización del conocimiento y el auge tecnológico, me inclino por considerar la primera, no por rebeldía con una mayoría que la critica como teoría, sino porque reconozco que en la actualidad los escenarios educativos no son estáticos y mucho menos regido por alguien en particular, que lo sabe todo y por tanto debemos esperar por directrices u orientaciones. pero la postura que asumo con respecto a este debate, sera aclarada en los párrafos siguientes donde expondré mis argumentos, claro desde mi perspectiva, como docente especialista en informática.
En este sentido, considero necesario iniciar por comprender el significado del término conectivismo, formado por el adjetivo conectivo, que la real academia española (RAE) lo define “que sirve para conectar”, y el sufijo ismo que para la RAE “forma sustantivos que significan, doctrina, sistema, escuela, modos”, aclarado el origen del termino conectivismo, sigo por detallar cada uno de los componentes. Primero es importante reconocer que en la actualidad la tecnología se ha convertido en un gran medio que sirve para conectar o unir, Siemens (2004) expresa que “la identificación de conexiones como actividades de aprendizaje, empieza a mover las teorías de aprendizaje hacia la edad digital”. Por tal motivo, ya no es posible experimentar y adquirir personalmente el aprendizaje que necesitamos para desempeñar una acción. Ahora es necesario desarrollar competencias en la formación de conexiones, debido a que no podemos experimentar todo, las experiencias de otras personas se convierten en sustitutos del conocimiento y por consiguiente también aprendemos a través de otras personas.
Siguiendo con el análisis del termino, aclaro el sufijo ismo, el cual, se refiere a la forma común de muchas personas de asumir el conectivismo como una cultura de aprendizaje, reconociendo, tal como lo expresa Siemens (ob.cit.) que “continuamente se está adquiriendo nueva información” y resulta vital desarrollar. “La habilidad de realizar distinciones entre la información importante y no importante“, comprendiendo que las decisiones están basadas en principios que cambian rápidamente.. siendo esencial la habilidad de reconocer cuándo una nueva información altera un entorno basado en las decisiones tomadas anteriormente.
Continuando con en el análisis Siemens (ob.cit.) señala como un antecedente de su trabajo y que fortaleció la conceptualización del conectivismo, la definición de Driscoll, la cual considera el aprendizaje como un cambio duradero obtenido a partir de las experiencias y de las interacciones del aprendiz con otras personas. Esto no es nuevo para cualquiera que conozca sobre las teorías de aprendizaje, ya se había planteado en el socioconstructivismo, un ejemplo de ello Vygotsky (1978). De lo anterior se desprende, que hay muchas maneras en que los conceptos nos llegan a la mente; no es necesaria su completa explicación, puesto que pueden representarse; de manera innata; o bien, a través de representaciones las cuales, otros también coinciden en esas representaciones. Lo que resulta en positivo, porque en al actualidad existe una diversidad de medios por el cual se puede acceder a estos conceptos por vez primera.
En este párrafo, me dedicare a precisar los argumentos sobre porque considero al conectivismo como teoría, pero aclaro como teoría emergente, por algo muy común en esta época a la que pertenecemos, la que algunos denominan postmoderna y otros contemporánea, En este contexto coincido con el autor, en lo inacabado de la teoría, por lo complejo que se presenta la sociedad actual, sumida en una dinámica de cambios permanentes, donde las teorías de aprendizaje tradicionales, el conductismo, el cognitivismo y el constructivismo utilizadas muy a menudo en la creación de ambientes instruccionales. Las cuales, fueron desarrolladas en una poca en la que el aprendizaje no había sido impactado por la tecnología. Es bien sabido por todos que en los últimos veinte años, la tecnología ha reorganizado la forma en la que vivimos, nos comunicamos y aprendemos. Ante esta realidad, las necesidades de aprendizaje y las teorías que describen los principios y procesos del aprendizaje, deben reflejar los ambientes sociales subyacentes, tal como lo expresa Vaill (1996) que “el aprendizaje debe constituir una forma de ser un conjunto permanente de actitudes y acciones que los individuos y grupos emplean para tratar de mantenerse al corriente de eventos sorpresivos, novedosos, caóticos, inevitables, recurrentes...”(p.42).
Pero existen algunos autores que la catalogan de supuesta teoría, porque sólo explica el aprendizaje en contextos tecnológicos e informacionales, ignorando cómo aprenden, por ejemplo, los miembros de las comunidades indígenas primitivas que aún existen y que no conocen la electricidad, argumento que lo considero pobre y ligero, porque en las mismas condiciones de esas comunidades indígenas aisladas de la civilización moderna, dimos como validas teorías como el Conductismo y constructivismo, pero en el contexto actual, el desarrollo tecnológico ha permitido incorporar a esas comunidades, la evolución de los satélites, es un ejemplo de ello, lo que ha permitido llevarle medios para que se comuniquen y se mantengan informados, dentro y fuera de su comunidad, entonces responder a las inquietudes de como explicar el aprendizaje en ese contexto a través de las relaciones de interconectividad tecnológica, o igualmente ¿cómo explicamos los aprendizajes que ocurren fuera de ese contexto, en otros contextos no tecnológicos?, ahora son respondidas y por ende es posible su incorporación a la sociedad digital.
Otras inquietudes que presentan los críticos a esta teoría, es que antes de la aparición de esta clase de tecnologías el ser humano no aprendió nada, este aspecto lo considero fuera de contexto, de alguien que no reconoce el crecimiento exponencial del conocimiento y que sin la tecnología no podríamos llegar fácilmente a ese conocimiento, a través de lo que señala Siemens, que “el punto de partida del conectivismo es el individuo. El conocimiento personal se compone de una red, la cual alimenta a organizaciones e instituciones, las que a su vez retroalimentan a la red, proveyendo nuevo aprendizaje para los individuos”(p.7).
Dicho lo anterior, considero que la gran aportación de Siemens es llamar la atención a todos de que existe una transformación radical del entorno influenciado por la era digital. Esto significa, en primer lugar, la digitalización y virtualización,, o sea, la codificación en medio electrónico de la información, la cual es ahora accesible como no lo era unas décadas atrás. En segundo lugar, la digitalización de las telecomunicaciones está generando niveles de intercambio de información a escala masiva que tampoco se evidenciaba anteriormente. Por tal motivo, La combinación de estos dos fenómenos tiene como consecuencia la creación de un espacio alternativo, al que conocemos como ciberespacio. En tercer lugar, tenemos la capacidad de procesamiento de información, para la cual no hay posibilidad de manipulación en el espacio físico. La inteligencia deja de ser inherentemente humana para pasar a ser un elemento esencial de entorno, en el cual la información y el conocimiento se producen, se representan, se procesan, se reorganizan y se reconectan constantemente, con una velocidad y magnitud que no tiene precedentes. En esas condiciones, podemos hablar de aprendizaje en el que los procesos cognitivos ocurren en el entorno.

A continuación presento un vídeo donde amplio aspectos relevantes sobre el conectivismo.




REFERENCIAS

Padrón, J. (2014). Crítica a la llamada "teoría del conectivismo" o "conectismo". [Documento en línea]. Disponible: http://padron.entretemas.com.ve/Conectvismo.pdf. [Consulta: 2017, Julio 9].

Siemens G. (2004). Conectivismo: Una teoría de aprendizaje para la era digital [Documento en línea]. Disponible: http://www.comenius.cl/recursos/virtual/minsal_v2/Modulo_1/Recursos/Lectura/conectivismo_Siemens.pdf. [Consulta: 2017, Julio 8]

Stephen, D. (2014).[Documento en línea]. Disponible: .https://ined21.com/problemas-del-conectivismo/. [Consulta: 2017, Julio 8]

Vaill, P., (1996).. El aprendizaje como una manera de comenzar. San Francisco, Jossey- Blass Inc.



martes, 15 de agosto de 2017

Lo pendular de las tendencias educativas

     No es fácil desarrollar una tertulia en sana paz sobre el rol actual del docente, de alguna manera es reconocido por la mayoría de la comunidad científica, que la época actual experimenta cambios continuos que permiten caracterizarla como la era de la complejidad y ante los graves problemas que presenta el Sistema Educativo Venezolano en todos sus niveles, el desempeño docente se encuentra caracterizado por una dinámica, la cual debe afrontar cada día con mucho entrega y compromiso. 

     Del mismo modo, Los enfoques disciplinares y las exigencias actuales con respecto al aprendizaje, las cuales debe promover el docente, y consciente que tienen su influencia desde ámbitos muy variados, estos aspectos, reflejan una profunda polarización de ideas y conceptos. Si algo puede caracterizar la época actual es considerar que en cuanto a la tarea de enseñar, la práctica docente se encuentra caracterizada por una gran oferta de opciones y diversas exigencias que, en los hechos, se presentan como una gran encrucijada. 
    
     Es frente a esta avalancha y multiplicidad de tendencias educativas, donde cada docente tiene que construir su estilo didáctico y desarrollar estrategias de enseñanza que promuevan resultados positivos. Sin embargo, no existe claridad sobre algunas contradicciones en los resultados que se esperan de su labor, como demandar que los estudiantes desarrollen una capacidad para el pensamiento critico o habilidades para el autoaprendizaje; por ello, el docente experimenta cierto desconcierto ante las inmensas posibilidades pedagógicas y didácticas que exige su labor. 
     
      Por otra parte, La política educativa que se ha establecido en Venezuela implica un conjunto de leyes y decretos que mas que traer beneficios sustanciales al proceso de enseñanza y aprendizaje, mas bien lo que han generado es un gran desconcierto en el desempeño docente. Podemos mencionar, la ley de Educación, la Ley Orgánica para la protección del Niño Niña y Adolescente (LOPNNA), la transformación curricular de Educación Media, así como el uso intensivo de las tecnologías de la información y la comunicación. 
     
      Desde este contexto, al docente se le demanda la mejora de los procesos e instrumentos para la evaluación de los aprendizajes, así como la atención tomando en cuenta los distintos niveles Socioeconómicos y culturales. Por su nivel de formulación diremos que se trata de metas y orientaciones de la política que se quedan en una perspectiva relativamente abstracta si no se logra de alguna manera concretarlos. Tales actos pueden ser realizados por una política general, como por ejemplo, un reforma contextualizada de la ley de educación, por una política institucional, como por ejemplo, una reforma curricular de Educación Media donde participen todos los actores del Sistema Educativo Venezolano, o por la concientización de una forma de trabajo por parte del docente, para lograr un enfoque de trabajo en el aula centrado en el aprendizaje por medio de la participación activa del estudiante. 
     
      Ante esta realidad, la práctica docente se realiza en un conjunto de situaciones particulares que generan un nuevo contexto. Si bien, no es intención de quien escribe este ensayo abordar las múltiples dimensiones que estructuran este contexto, sí es conveniente enunciar algunas que lo afectan de manera inmediata. La globalización, la tecnología, El Internet, entre otros, que también generan un impacto en la educación. Desde esta perspectiva, las nuevas tendencias conceden gran relevancia a la innovación educativa. hay un énfasis vinculado con la necesidad permanente de innovar en el campo de la enseñanza. Al mismo tiempo, la innovación se convierte en un bien, se dan nuevas denominaciones a desarrollos de teorías, como consecuencia de nuevos desarrollos en una línea de trabajo que se viene generando, por ejemplo, desde los diversos enfoques de enseñanza basados en el constructivismo o como resultado del impacto del potencial tecnológico en nuestros días. 
      
      Por tal motivo, se espera que el docente tenga una respuesta, tenga algo que incorporar, que se encuentre actualizado y en sintonia con los cambios que se le presentan en este nuevo contexto. Para concluir mis planteamiento, considero pertinente resaltar las ideas de Díaz (2005), “no existe un método o una estrategia que en sí misma sea superior a cualquier otra. Cualquier método, cualquier estrategia puede ser pertinente para una situación específica. La opción por una u otra forma de trabajo depende de la personalidad y estilo de cada docente, de los propósitos educativos que orienten la labor, de la disciplina de estudio, del grado escolar donde se trabaje, del número de alumnos, de la caracterización de su desempeño escolar y de las condiciones generales de trabajo”. 
     
      En tal sentido, resulta difícil aceptar que existe una solución universal, considero mas bien que una solución sea más pertinente que otra, va a depender del contexto, cuesta reconocer que en el ejercicio docente pueda existir una especie de ensayo y error. Donde se reconozca las ventajas que cada estrategia pedagógica genera, pero que también identifique las limitaciones de todas y cada una de ellas, no es fácil aceptar que cada intervención del docente debe estar signada por la singularidad. No hay cursos o asignaturas iguales, no hay docentes iguales y no hay grupos de estudiantes iguales. Resulta difícil reconocer que en este tiempo de innovaciones, la didáctica, tiene todavía muchas cosas que decir. 

Referencias

Díaz Barriga, A. (2005). El profesor de educación superior frente a las demandas de los nuevos debates educativos. Perfiles Educativos v.27 n. 108. Instituto de Investigaciones sobre la Universidad y la Educación, UNAM, México D.F.